lunes, 23 de agosto de 2010

GEOGRAFIA ECONOMICA JAPONESA

La economía japonesa se ha debatido, desde el principio, entre el impulso de la iniciativa pública y la privada. El peso de las inversiones ha cambiado de signo según la coyuntura económica, o si determinados sectores se consideran o no estratégicos. Los japoneses no han tenido la obsesión liberal de que el gobierno no interviniese en la economía.
El sector empresarial japonés está muy bien estructurado aunque con una cierta polaridad entre las grandes y las pequeñas empresas. El 40% de los trabajadores están empleados por empresas con menos de 10 trabajadores, mientras que sólo un 25% del proletariado está empleado en compañías de más de 100 trabajadores.
Las pequeñas empresas son subsidiarias de las grandes compañías, ya que se dedican a la fabricación de componentes para los productos de estas. No obstante, algunas pequeñas firmas, que se dedican principalmente al textil, son independientes. Existen multitud de constructoras de maquinaria y de servicios industriales. Normalmente, las pequeñas empresas que facilitan componentes para las grandes compañías están asociadas, con el fin de poner unas normas estándar en la fabricación de los mismos, y así no depender en exclusiva del contrato con una gran empresa. Esto les da cierta independencia, aunque la norma es la fidelidad entre compañías.
No obstante, la producción mayoritaria para el mercado está dominada por las grandes empresas. Sólo en el textil se observa una mayor fragmentación. Sin embargo, la tendencia es a la concentración y a la absorción de las pequeñas empresas por las grandes.
En el comercio la dispersión es mayor y aunque dominan las grandes firmas subsisten las pequeñas y medianas, sobre todo si son especializadas. El consumo interno es la base de la economía japonesa.

No hay comentarios:

Publicar un comentario